6 pasos para prepararte mentalmente para el parto
El parto tiene un gran impacto a nivel corporal, pero también emocional. Es un evento psicológicamente muy significativo, una experiencia neuro-hormonal vital en la vida de una mujer. Se da un estado alterado de conciencia en el que intervienen diferentes hormonas. Popularmente se conoce como “el planeta parto”. Los sentidos de la mujer están alterados, estando más sensible a los estímulos externos. Nuestra psicóloga Anaïs Barcelona te da 6 consejos prácticos para prepararte mentalmente para ese momento.
El parto, momento de vulnerabilidad
La experiencia de parto queda muy gravada tanto en la madre como en el bebé. La mujer puede salir del parto muy empoderada si la experiencia es positiva. Pero, también, muy vulnerable cuando no ha sido así. La parte anatómica y fisiológica es importante, pero no se debe olvidar la parte psicológica. Es decir, que la mujer llegue al parto con un adecuado estado de ánimo, sin miedo ni preocupaciones excesivas y con confianza hacia el equipo que la va a acompañar a dar a luz.
¿Qué expectativas tengo del parto?
Se acerca tu fecha probable de parto y es normal que estés preocupada sobre cómo irá, sobre todo si eres madre primeriza. Hay muchos aspectos que están fuera de tu control durante el parto, por ello, conviene ser flexible con las expectativas para evitar frustraciones.
La preparación emocional para el parto es fundamental para todas las mujeres, pero más aún para aquellas que han tenido una primera experiencia negativa, ya que su ansiedad será más elevada. La experiencia de parto es única para cada mujer. Una misma mujer también puede tener experiencias de parto muy distintas. La vivencia del parto dependerá de las expectativas de la mujer, la cultura, la psicología y el modo en la que es atendida por parte de los profesionales sanitarios.
¿Qué puedo hacer para vivir el parto con calma?
El cortisol es una hormona relacionada con el estrés que dificulta el parto, haciéndolo más largo y doloroso. Controlar el miedo y la ansiedad en el parto es vital. Estas recomendaciones ayudarán a la liberación de la oxitocina, la hormona del amor y de la calma, que facilitará el trabajo de parto.
- Habla con la persona que te va a acompañar en el parto sobre cómo te gustaría que fuera el parto y cómo te puede ayudar. Por ejemplo, le puedes expresar las palabras que crees que te pueden tranquilizar, la música que te puede ayudar, los masajes que te puede realizar, etc. También es útil y necesario que habléis y redactéis juntos el plan de parto, el documento que recoge tus preferencias y necesidades durante el parto.
- Infórmate todo lo que puedas. Las clases de preparación al parto y la lectura de guías y libros especializados te ayudarán. Conviene que conozcas tus derechos, los diferentes tipos de parto, las técnicas para aliviar el dolor, las diferentes posturas y qué puedes hacer tú misma para disminuir el dolor y favorecer la dilatación.
- Practica técnicas de respiración y relajación que te ayudaran a reducir la ansiedad y el dolor. La respiración en el parto es crucial, ya que alivia el dolor, mejora la circulación de la sangre y ayuda a adelantar el parto y a relajarse.
- Aquello que sentimos depende de lo que pensamos, por lo tanto, detecta los pensamientos negativos que puedas tener y cámbialos por otros más positivos y realistas.
- Practica técnicas de visualización, un elemento de distracción que permite dirigir la atención lejos de aquello que te preocupa. Se trata de crear una imagen mental de calma que proyectarás en momentos de ansiedad o dolor.
- Practica autoafirmaciones positivas que te dirás a ti misma durante el parto. Por ejemplo, ¡“yo puedo hacerlo!”, “ya queda poco para verle la cara”, “mi cuerpo está preparado para hacerlo”, etc.